Tessa es una pequeña perrita que adora a su mamá, pero sin duda alguna no puede compararse con su banana de peluche, ella es feliz cuando se acurruca con su juguete, así solo esté hecho de tela y relleno; para ella es su más valiosa posesión.
Shanna Loren la madre adoptiva de esta pequeña, le compró el curioso juguete hace cinco años cuando otro perro adoptado por ella dañó el juguete favorito de Tessa.
Shanna dijo a The Dodo:
«Lo encontré en una papelera en una tienda de mascotas, pero sabía que era del tamaño de los juguetes que le gustan, ella inmediatamente tomó la banana en el momento en que se la di».
Perro de 20 años es feliz con su banana de peluche
Cuando reciben visitas en casa, Tessa enseña a las personas su precioso juguete y se asegura que sea visto y elogiado.
Shanna agregó:
«Ella quiere que la gente lo reconozca antes de ir a dejarlo, y cuando lo deja, lo pone en la cama que considere mejor».
Tessa no permite que la vejez o su perdida auditiva se interponga en sus objetivos, su madre comenta también:
«Les pedimos a los invitados que le digan que vieron su banana para que ella pueda recostarse, es gracioso ahora que está sorda de que nuestros amigos le griten: «¡ME GUSTA TU BANANA, TESSA!».
Shanna comenta:
«Ella nunca ha permitido que sea un ‘juguete’, es su pequeña posesión y es su vida».
Nunca eres lo suficientemente viejo para acurrucarte con tu juguete favorito, al menos así lo cree Tessa y a su familia le parece adorable.
