Encontrar actividades divertidas para los pequeños en estos tiempos no es una tarea muy fácil para los padres, pero David Carter un educador de Saskatoon, Canadá, encontró el proyecto ideal para llevar a cabo junto a su hijo Jeremiah de 10 años, y juntos crearon una biblioteca de palos para los perros de su localidad.
David se esfuerza cada semana por ofrecer un proyecto diferente a su hijo para realizar juntos y crear algo. De esta manera fue como el padre vio una publicación de una persona en Nueva Zelanda que creó una biblioteca de palos, un espacio donde pueden guardar y encontrar palos para los perros que quieren jugar a buscar mientas se divierten en el parque.
David habló con CNN en una entrevista refiriéndose a su hijo y dijo:
«Le gusta hacer deportes, está loco por los deportes y le gusta salir con sus amigos. Y eso no ha estado sucediendo mucho últimamente».
Niño crea una ‘biblioteca de palos’ para perros
La familia tiene una adorable perrita Goldendoodle de 2 años llamada Nahla, así que este proyecto tenía una gran motivación también en algo que Nahla pudiera disfrutar en sus visitas al parque.
David cuenta:
«Tuvimos que medir y calcular mucho para cortar la madera y juntarlo todo. Además, Jeremiah pudo usar las herramientas eléctricas, lo que siempre hace que sea un buen momento».
Cuando el proyecto estuvo listo, emocionados ambos se dirigieron al parque, allí lo ataron muy bien a la cerca y recogieron algunos palos que consideraron que los perros disfrutarían. Ahora solo quedaba esperar que los perros disfrutaran de su nueva «biblioteca».
Cuando volvieron días después al parque se llevaron una agradable sorpresa al descubrir que las personas estaban dando uso a la biblioteca y el cajón contaba con un buen número de palos para que los perros pudieran elegir el de su preferencia.
David agregó:
«Cuando íbamos al parque para perros, no había palos allí, o muchos palos por ahí. Parece hacer feliz a la gente y le ha dado algo de diversión y un poco de propósito».
CBC Saskatoon también habló con David y Jeremiah acerca de la biblioteca de palos, ellos explicaron que tan pronto la idea tomó sentido, la familia recogió un poco de madera de su garaje y de inmediato padre e hijo trabajaron para hacer algo especial para los perros.
Jeremiah añadió:
«Debo aprender a usar una pistola de clavos. Teníamos esta herramienta de grabación en la que quemé las letras. Así que sí, nos divertimos mucho».
La biblioteca de palos es el primer proyecto comunitario que realizan, y ahora este padre y su hijo están planeando crear otro cajón para llevar a otro parque para perros. Jeremiah está muy emocionado por la aceptación que ha logrado su proyecto.
David finalmente dice:
«Parece ser algo bueno para la comunidad. Puede conectarnos de alguna manera cuando no estamos tan conectados como normalmente».
