Debido a las medidas de aislamiento por el Covid-19, las personas se encuentran disfrutando de sus animales de compañía con mayor frecuencia, fortaleciendo así su vínculo con éstos. Como es el caso de Ida Myrin quien se llevó una gran sorpresa al ver por medio de una cámara oculta a su gatito buscándola por toda la casa después de que saliera por un momento.
El comportamiento del gato llamado Isola le causó mucha ternura, pero a la vez preocupación porque ahora la mujer no se siente capaz de volver a dejarlo a solas nunca más.
Las desgarradoras imágenes se han vuelto virales después de que se dieran a conocer por medio de redes sociales el mes pasado y han desencadenado toda una serie de comentarios.
Gato maullando por tristeza al no encontrar a su dueña
Isola es de raza ragdoll, tiene tres años y ha formado parte de la familia de Ida desde que tiene 12 semanas.
Cabe aclarar que la mujer que salió de su casa en Varmland, Suecia, permaneció por fuera durante media hora y solo eso bastó para que el felino se mostrara ansioso.
Ida le dijo a Daily Star:
«Al principio pensamos que era bastante lindo, pero cuando notamos que no se detuvo, se sintió triste».
En el vídeo captado a través de una cámara oculta se logra ver al gatito maullando y buscándola por el pasillo junto a su correa, como si estuviese pensando «¿a dónde diablos has ido?».
Al no encontrar a nadie, él agarra la correa de nuevo y se escucha un maullido aún más desgarrador.
Algunos usuarios de Internet afirman que los maullidos fueron su forma de «llorar» al no encontrar a su madre cerca.
Ante éstos comentarios, la mujer afirmó que el gato suele hacer mucho ese tono «quejumbroso» y triste, así que es difícil saber si estaba llorando. Pero debido a que no le gusta la soledad, lo más probable es que así fuera.
La mujer le explicó que Isola es mimado, algo perezoso y muy amoroso, por lo que siempre está buscando obtener atención y maulla cada vez que no la recibe, según Bored Panda.
Ida dijo:
«Siempre se mueve para poder vernos a los dos, le encantan los buenos abrazos».
El gato siempre se ha sentido muy apegado a su familia, pero debido al aislamiento se está acostumbrando a tener siempre a alguien cerca.
Algunos usuarios le han sugerido a Ida que adopte a otro felino para que pueda hacerle compañía a Isola, a lo que la mujer contestó que ella ya tiene a otro, y de hecho cuando salió de casa estaba llevándolo al veterinario.
La buena noticia es que el gato no tuvo que esperar mucho tiempo a su madre, aunque a partir de ahora deberá acostumbrarse a estar sin compañía cuando inevitablemente se presente la situación.
Después de llegar a casa, la mujer tomó una fotografía de sus dos gatos acostados y disfrutando el uno del otro.
Ida dijo:
«Generalmente se llevan bien, el otro gato es un macho de 8 años… no siempre aprecia la compañía de Isola. Pero se acicalan y duermen juntos de vez en cuando».
Si deseas conocer más sobre Isola, puedes seguir a su madre en su página de Instagram.
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