Cassie vive en una casa campestre en California, mientras estaba limpiando los establos de sus caballos, escuchó un ruido que parecía ser de un animal pequeño. Al principio estaba confundida, pues pensaba que era un pájaro, pero vio que uno de sus caballos miraba hacia los arbustos y que allí había algo.
Cassie, dijo a Love Meow:
«A medida que me acercaba, me di cuenta de que eran pequeños maullidos. Era una gatita que estaba llorando, pidiendo ayuda».
Gatita sin hogar corre buscando ayuda
La joven decidió llamar a la pequeña felina cuando se acercó, e inmediatamente salió corriendo de los arbustos y se dirigió hacia ella. Cuando Cassie la levantó en sus brazos, comenzó a mover sus patitas de felicidad, y parecía buscar comida.
Cassie, dijo:
«La llevé a un cuarto y cuando estaba tratando de llenar un tazón de agua, ella comenzó a beber mucho del agua que caía al suelo desde la manguera».
La pequeña estaba sedienta y hambrienta, por lo que Cassie puso la manguera cerca de ella y la dejó beber hasta que calmara la sed. También, tomó una lata de comida húmeda de su auto, que era para sus gatos, y le preparó un poco de alimento.
Cassie, dijo:
«Se comió muy rápido el alimento. Estaba delgada y cubierta de pulgas. Terminé con mis tareas y me fui a casa con ella».
Al llegar a casa, le dio un baño para eliminar las pulgas, la secó y después de esto estaba muy cansada, así que durmió profundamente durante toda la noche en una cómoda cama.
Cassie dijo:
«Creo que ella sabía que finalmente estaba a salvo y que podía descansar tranquila».
Al día siguiente, cuando Cassie despertó, pudo ver a la peluda con una actitud diferente, estaba corriendo y jugando por todo el lugar.
Parecía que se estuviera adueñando de la casa, era tan valiente que recorría todo el lugar saludando y tocando a las otras mascotas de Cassie. En pocos días, ya se había adaptado, era muy astuta y juguetona, no dudó nunca en compartir con lo otros animales, pero actuaba como la jefa.
Se volvió de buen apetito, nunca desperdiciaba un bocado de comida, también se apegó mucho a su madre humana y siempre se acurruca con ella.
Cassie, dijo:
«Ahora está completamente sana. Le encanta jugar y luchar con mis otros gatos, a pesar de que todavía es muy pequeña».
Ella no tiene idea de cómo la pequeña terminó en ese arbusto, pero regresó los días siguientes para ver si la madre estaba por allí. Pero ni la madre, o cualquier otro gato estaban cerca del lugar. No se volvió a ver algo parecido, a lo mejor la habían abandonado.
Cassie, dijo:
«Tuvo mucha suerte ese día, definitivamente estaba en el lugar correcto, en el momento correcto».
La pequeña se ha convertido en una gata muy cariñosa, ha ganado peso y mucha energía, su personalidad brilla cada día que pasa.
Aunque está creciendo rápidamente, todavía es muy apegada a su madre humana, por lo que la persigue a todas partes en la casa. La gatita tiene una muy buena relación con los otros gatos y perros de la casa, está muy feliz y enamorada de su gran familia.
Cassie, dijo:
«Ella está segura, feliz y tendrá la mejor vida. La he llamado Charm».
Seguramente Charm tuvo mucha suerte, pero gracias a ello tendrá una vida llena de amor, con una hermosa familia para siempre.
Deja un comentario