En ocasiones, lo único que necesitamos para superar los momentos difíciles es la compañía de un buen amigo, y el mejor ejemplo de ello es este pitbull que superó su tristeza gracias a la ayuda de un adorable y pequeño gatito.
En el año 2015, Julie Burroughs, rescató al pitbull llamado Dude de una isla del caribe, cuando solo era un pequeño cachorro que sufría de parvovirosis. Desde ese día, vivía en compañía de su madre humana y otra pitbull de nombre Harley Jane, que se convirtió en su hermana adoptiva preferida.
En ese momento, todos eran felices disfrutando de su vida en Florida, y siempre acompañaron a su madre durante muchos altibajos, incluido el divorcio.
Pitbull afligido encuentra consuelo en un gatito
Los dos pitbulls eran inseparables e increíblemente cariñosos, eran la pareja de amigos perfecta, pero cuando Harley Jane murió, todo cambió para Dude. El perro se convirtió en un animal muy triste y solitario; su madre estaba preocupada y sabía que necesitaba un amigo para superar el duelo.
Julie dijo a TODAY:
«Me sentí mal por Dude porque estaba muy deprimido. Incluso probé collares de feromonas, pero sabía que necesitaba un amigo».
Desafortunadamente, la mujer no estaba en condiciones para adoptar a otro perro, pues su trabajo le estaba quitando mucho tiempo y estaba demasiado ocupada, pero ella quería una solución, por lo que pensó que adoptar a un animal diferente y más exclusivo, sería la respuesta a la soledad de Dude.
Entonces, en lugar de adoptar a otro perro, llegó a la conclusión de que adoptar a un pequeño gatito sería lo mejor para todos. Así que la mujer empezó la búsqueda del gatito, y un día vio la foto de un pequeño atigrado (Ace), que había sido rescatado por un bombero.
Desde que Julie vio a Ace, supo que era el gatito indicado para ellos, pero el proceso de incorporación a la familia tendría que ser cuidadoso. Al principio, acostumbrar a ambos animales era complicado, por lo que Julie mantenía a dude con correa mientras miraba de manera curiosa a Ace.
Pero un día, Dude decidió conocer más de cerca a su pequeño amigo, y desde entonces desarrollaron un vínculo de hermandad inquebrantable. Se convirtieron en mejores amigos, pero Ace dejó claro que él se haría cargo de la manada, y sería quien definiría sus aventuras y travesuras.
De hecho, el pequeño travieso mete en numerosos problemas al aparentemente inocente Dude, pero en realidad son los socios perfectos en cada travesura. A veces, Ace se sube al mostrador y tira los objetos o bolsas de golosinas que encuentra, para que Dude los atrape y luego puedan darse un festín.
Siempre lo hacen cuando su madre no está, por ello ha tenido que tomar medidas al respecto, como dejar las golosinas en el armario. En otra ocasión, Julie llegó a casa y se encontró con restos de revistas y periódicos masticados esparcidos por todo el suelo, un verdadero basurero.
Pero la adorable pareja de amigos no siempre son un problema, Ace también ha traído mucha felicidad a la vida de Dude y Julie. Cuando no están conspirando para hacer algún tipo de travesura, ellos juegan, luchan y luego de la diversión, toman una larga siesta juntos.
Aunque son dos especies distintas, a ellos no parece importarles mucho, y solo disfrutan de su agradable compañía viviendo la vida al máximo. Sin duda, Ace ayudó a Dude a salir de su triste situación, realmente cambió su vida y demostró que un buen amigo puede lograr muchas cosas.
Julie espera que la conmovedora historia de Dude y Ace, les muestre a las personas lo dulces que pueden llegar a ser los pitbulls.
Además, los que piensen que los perros y gatos no pueden ser amigos, claramente no conocen el adorable vínculo que comparten estos dos.