Por alguna razón, un adorable perro no come su comida diaria a menos que su familia se la prepare con mucho amor, situación que ha dejado sorprendidos a todas las personas que conocen a este caprichoso Golden Retriever.
Anteriormente, el perrito llamado Enzo contrajo un virus estomacal, por lo que su veterinario recomendó que lo mejor era alimentarlo con alimentos húmedos por unos días. Cuando se sintió mejor, su familia poco a poco le dio su comida habitual, así que la mezclaba con algo de comida húmeda para que su estómago no se agobiara.
En unos días, Enzo nuevamente comenzó a recibir su comida habitual, pero comenzó a suceder algo bastante extraño para todos.
Perro no come su comida sin «preparar»
Enzo decidió dejar de comer, y nadie entendía por qué lo hacía. Su familia estaba preocupada porque pensaban que aún seguía enfermo, pero todo estaba bien. El perro simplemente no quería comer, y es algo muy inusual en un golden retriever, así que su familia decidió prestar atención a todas las señales.
Su familia tenía la esperanza de que Enzo diera alguna pista de su comportamiento, pero al principio no lograron entenderlo muy bien.
Alicia, la madre de Enzo, dijo a The Dodo:
«Se nota que siempre está pensando y contemplando. Tiene cejas muy expresivas que comunican sus pensamientos sobre todo».
La familia del perro tuvo una lluvia de ideas para encontrar la razón por la cual no estaba comiendo y encontrar alguna solución. Luego de pensar por varios minutos, finalmente se dieron cuenta del por qué no estaba comiendo con normalidad, y la respuesta era demasiado divertida.
Alicia comentó:
«Un día tuvimos una idea. Efectivamente, recogimos la comida normal, la revolvimos con una cuchara, la volvimos a colocar… Se la comió al instante».
Al parecer, Enzo había visto como se preparaba su comida especial mientras estaba enfermo y pensaba que así es como la debían de preparar siempre.
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Enzo quería que su familia revolviera su comida con mucho amor, y una vez que lo hicieron, el perro estaba feliz de comer lo que le dieran. Ahora, cada vez que llega la hora de comer, su familia se asegura de revolver su comida antes de servirla, ya que no le puede faltar el ingrediente secreto.
Alicia añadió:
«Ahora es solo un paso en nuestra rutina».
Sin duda, es una rutina que hace muy feliz a Enzo, y mientras esté comiendo, su familia estará feliz de complacerlo todos los días.
