Desde hace varios meses, la guerra en Ucrania se intensificó y miles de personas han dado un paso al frente para defender a su país. Evidentemente los animales también han sido de gran apoyo durante todo este proceso, muchos de ellos han estado trabajando junto a los soldados ucranianos para salvar vidas de muchos civiles y levantar la moral de sus compañeros humanos.
Dentro de todo lo que acontece a diario entre las tropas ucranianas, un nuevo recluta y quizás el más inesperado de todos ha logrado atraer la atención de miles de personas de todo el mundo, un antiguo perro acompañante de los soldados rusos que ha «cambiado de bando» luego de ser rescatado por tropas ucranianas.
Se trata de Max, un belga malinois de 3 años, quien originalmente era parte de las tropas rusas. El canino fue encontrado al borde de la muerte, con hambre y completamente solo en un área que vivió algunos de los peores combates desde que inició la guerra.
Perro de guerra abandonado por tropas rusas cambia de bando
El perro fue atendido por las tropas ucranianas hasta que recuperó su salud y desde entonces ha sido entrenado para entender ucraniano y ahora es un especialista olfateando trampas explosivas y minas sin explotar.
Un miembro de la Guardia Nacional de Ucrania, llamado Dmitry, le dijo a Daily Star:
«De ahora en adelante, Max servirá en el lado derecho, defendiendo a Ucrania y mordisqueando los traseros rusos».
Lo cierto es que las tropas se sorprendieron al ver al perro abandonado a su suerte; no solamente fue algo inhumano, además ellos consideran que los perros de guerra son valiosos, ya están perfectamente entrenados y suelen manejar un fuerte vínculo con sus compañeros.
El militar agregó:
“Max se ha convertido en un verdadero favorito entre los guardias. No podemos entender por qué los rusos dejarían atrás a un animal tan adorable. Los ucranianos aman a los perros, los consideran parte de la familia”.
Al parecer, Max era parte de las tropas del Kremlin que habían capturado un pueblo en la región de Mykolaiv cerca del Mar Negro. El perro aparentemente fue abandonado cuando las fuerzas de Mad Vlad se retiraron y sobrevivió durante este tiempo comiendo comida podrida.
Sin duda, la historia de Max es sorprendente, y las tropas ucranianas parecen estar felices de que el canino haya tomado la decisión correcta al incorporarse como otro miembro del equipo, y están orgullosos de acoger a este nuevo y adorable recluta.