Algunos animales definitivamente están destinados a ser una parte importante en el desarrollo de nuestras vidas, pues suelen desarrollar habilidades que son de gran ayuda, sobre todo para las personas que lo necesitan.
Bracha Fischel, es una pintora muy talentosa de Israel, que lamentablemente padece de tetraplejia, una enfermedad que produce parálisis total o parcial en los brazos y piernas. Ella tiene uso limitado en sus manos y permanece en una silla de ruedas, pero esto no le ha impedido continuar con su hermoso arte.
Bracha se las ha ingeniado para continuar pintando hermosos cuadros, pero cabe resaltar que existe una adorable asistente que la ayuda detrás de escena.
Perrita de servicio aprende a alimentar a su dueña
Debido a sus necesidades especiales, a Bracha se le asignó una perrita de servicio llamada Donna, y desde que se conocieron se convirtieron en mejores amigas. La relación entre ambas chicas ha sido muy especial, y aunque solo llevan aproximadamente un año juntas, parece que se conocieran desde siempre.
Donna llegó a la vida de Bracha para facilitarle las cosas, y por lo general la ayuda en las tareas diarias, como abrir puertas y recoger objetos. Siempre ha realizado muy bien su trabajo, tanto que hasta se convirtió en la mejor asistente durante el proceso artístico de Bracha.
Cada vez que ella inicia un proyecto artístico, Donna le lleva felizmente los pinceles o la herramienta que necesite para terminar el trabajo.
Bracha dijo a The Dodo:
«Donna trae pinceles a mi boca, así como lápices, rotuladores o todo lo que necesito para pintar».
La inteligente perrita se ha convertido en parte esencial a la hora de pintar, y sin duda ya es parte del equipo artístico de Bracha.
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Es muy inspirador lo que hace Donna, pero esto se queda corto si lo comparamos con la forma más importante en la que ayuda a su mamá. De alguna manera analizó que su amiga necesita ser alimentada, y por instinto, aprendió a alimentarla de una forma muy curiosa.
Donna literalmente ayuda a comer a su mejor amiga, pues sostiene una cuchara modificada con su hocico y lentamente le da el alimento.
Bracha comentó:
«Aparentemente, es la primera perrita que aprende a hacer esto».
Desde entonces, cuando llega la hora de la comida, Donna se convierte en una de las protagonistas del emotivo momento, es un ejemplo de amor verdadero. Su amistad ha demostrado que va más allá de una simple unión por necesidad y que, por el contrario, Donna está para amar a Bracha.
Al parecer, Donna presta sus servicios con mucha felicidad, pues sabe que está ayudando a que su mejor amiga tenga una vida más fácil.
Bracha dijo:
«Somos un buen equipo. No podría hacerlo sin ella».
Ahora, cada vez que Bracha termina una pintura, sabe que no es solo su trabajo, sino que también es el resultado del trabajo de su amiga.
Sin duda, una historia que demuestra lo importante que suelen ser los animales para algunas personas, esperamos que esta amistad permanezca unida por siempre.
