Molly, una adorable perrita de raza springer spaniel, desapareció recientemente luego de que su padre, Ricky Lyle, y ella, dieran una caminata por las montañas Mourne en Irlanda del Norte. Ricky asegura que él y Molly salen a caminar por las montañas con frecuencia y a veces se separan unos metros, pero siempre se reencuentra pocos metros después.
El padre de la Molly asegura que su memoria es perfecta, así que la lleva sin correa porque no se escapa. Ricky recuerda que cuando Molly desapareció durante su excursión se, acercaba una pequeña tormenta. Nada fuera de lo usual, solo había bastante viento.
El hombre le dijo a Express.co.uk:
“Ella tomó a la izquierda y yo subí un poco. Yo estaba a favor de ella, así que, sin importar cuánto gritara o silbara, ella simplemente no podía escucharme. Me quedé allí un par de horas buscándola, pero hacía mucho frío y la tormenta empeoraba, así que no pude quedarme más tiempo».
Perrita está feliz de reencontrarse con su padre tras dos noches de tormenta
Ricky regresó al auto y se mantuvo allí hasta que oscureció, con la esperanza de que ella siguiera el rastro y regresara por la ruta. La tormenta se había vuelto muy fuerte para ese momento, el viento soplaba muy rápido y caía mucha nieve. Era demasiado peligroso y el hombre no tuvo más remedio que dejarla.
De inmediato, Ricky buscó ayuda en la comunidad local a través de su cuenta de Facebook y la respuesta fue asombrosa al día siguiente.
El hombre dijo:
“Todos con los que hablamos en las montañas estaban allá arriba buscando a Molly. Alguien incluso levantó su dron para buscarla”.
Los esfuerzos por dar con el paradero de la perrita continuaban, pero Molly no se encontraba por ningún lado, y Ricky comenzó a perder la esperanza cuando revisaron en el fondo de los acantilados, en caso de que ella hubiera corrido por el borde durante la tormenta y se hubiera caído.
Por fortuna, Ricky recibió una llamada donde avisaban de que alguien había visto a Molly. El excursionista que la vio trató de atraerla con un sándwich, pero la pobre chica estaba muy asustada y salió corriendo tan pronto como vio a las personas.
De inmediato, Ricky se dirigió al lugar y, junto con un guardabosques de Mourne Heritage Trust, lograron rescatar a Molly de la naturaleza y llevarla de vuelta a casa. De acuerdo con su padre, ella es una pequeña muy valiente y aventurera.
Molly es una perrita rescatada, por lo que Ricky no está seguro de su edad exacta, pero piensa que debe tener entre cinco y siete años.
Cuando se le preguntó acerca de la tormenta y el peligro de estar en el área en aquel momento, Ricky aseguró que ese día no debieron ir a caminar.
Finalmente, Ricky dijo:
“Con Molly, estamos en las montañas todo el tiempo y hemos visto condiciones aún peores que esas. Pero ese día, no debíamos separarnos porque no pude hacer el retiro, ya que estaba gritando al viento y ella no podía escucharme”.