Esta es la historia de George, un perro de Tennessee (EE.UU.) que se encontraba realmente agobiado tras la muerte de su mejor amigo Blackie, un labrador de 12 años, hasta que apareció en su vida un amigo inusual quien es ahora su mayor consuelo.
Jacquie Litton, es la mamá de George y dudaba de que este pudiese salir de la depresión causada por la partida de su amigo. Pero todo cambió con la llegada de su nuevo y peculiar compañero de vida.
Pato consuela a un perro deprimido
Este amistoso pato apareció sin previo aviso en el porche de su casa pasados dos años desde la pérdida de Blackie, y ha sido quien desde entonces le ha brindado a George paz, esperanza de vida y un nuevo motivo para ser feliz, además de convertirse en un miembro más de la familia.
Jacquie escribió en Facebook:
«No tenemos idea de dónde vino este pato, pero seguramente él quiere a George y desde que el pato llegó, George no ha llorado una vez. Es extraño para un pato que aparezca justo en nuestra casa y estar unido a un perro, y aún más extraño la semana del aniversario de la muerte de Blackie».
Antes de la aparición del emplumado, Jacquie afirma que George:
«En dos ocasiones Estuvo a punto de morir. No comía. moría de hambre, tenía ansiedad, y una multitud de enfermedades debido a la masticación de sí mismo».
Ahora, George y Donald, como llamaron al pato, se han vuelto inseparables, compartiendo incluso la misma cama.
Resulta curioso ver cómo dos especies totalmente diferentes logran congeniar de una manera tan natural.
Sin duda alguna, estos dos amigos estaban destinados a conocerse.