Dos adorables gatitos fueron encontrados en los alrededores de una granja en New Hampshire, Estados Unidos. Con la intención de ofrecerles una mejor vida, fueron trasladados a Monadnock Humane Society.
Los gatitos eran muy tímidos al principio y tan pronto como llegaron al nuevo hogar se resguardaron. Connie, quien pertenece a Tails from the Foster Kittens y es voluntaria en la Humane Society, los llevó a casa donde adecuó un espacio para ellos. Los llamó Peanut Butter y Jelly.
Peanut Butter perdió el temor pronto, era muy curioso y los juguetes atraían su atención; quería conocer todo. Por su parte, Jelly se escondió detrás de él como un escudo.
Gatito encontrado se recupera al descubrir la felicidad en este hogar
Connie trató de atraer la atención de Jelly con algunas golosinas, pero Peanut Butter quería ese delicioso bocadillo para él.
La mujer le dijo a Love Meow:
«Peanut Butter rápidamente se dio cuenta de la alegría de que le frotaran la barbilla y le rascaran la espalda, pero todavía duda en situaciones nuevas».
En cada intento de Connie por atraer a la pequeña Jelly, su entusiasta y travieso hermano irrumpe para reclamar la atención para él. A veces, incluso parece que desea ayudar, pero solo busca ser recompensado con golosinas.
Connie cuenta:
«Su hermana le tiene mucho miedo a la gente y en un intento por hacer amigos, rompí la todopoderosa comida para bebés de carne que ningún gatito puede resistir, para tratar de conquistarla. Peanut Butter se zambulló de cabeza la primera vez que olió eso».
El esponjoso gatito gris era muy enérgico y poco a poco empezó a contagiar a su tímida hermana. Peanut Butter y Jelly pasaron sus primeros días refugiados en el baño con temor a explorar otros espacios, pero medida que se recuperaba y era más fuerte, el pequeño decidió salir y explorar su nuevo hogar fuera de su zona de confort.
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Mientras todos dormían, el curioso Peanut Butter decidió emprender su propia excursión exploratoria a la habitación contigua, y su hermana lo seguía de cerca. Para el gatito la habitación era asombrosa, mucho más amplia para jugar y brincar libremente.
Jelly necesita un poco de tiempo para sentirse lo suficientemente segura como para recorrer los espacios durante el día. Por su parte, Peanut Butter ha inspeccionado completamente la habitación de al lado y parece haber dado total aprobación jugando y trepando a los árboles para gatos.
Peanut crece rápidamente y ahora es mucho más ruidoso y valiente. Incluso se atreve a entrar en la oficina de costura de Connie como su ayudante, realmente disfruta la compañía de su nueva familia humana.
Connie añadió:
«Peanut Butter es más valiente que Jelly con la gente, ronronea rápidamente y le gusta jugar. Jelly es bastante reservada conmigo y sigue diciéndome que nunca la alcanzaré, pero ya he visto progresos».
Este adorable gatito es muy feliz en su vida como gato doméstico, y trata de ayudar a su hermana a tener un poco más de confianza, mientras continúa recorriendo la casa con total propiedad.
Connie dijo:
«Estoy segura de que con el tiempo llegará a confiar. A Peanut Butter le gusta ver a su hermana muchas veces cada vez que los visito, lo cual es súper dulce».
Puedes conocer un poco más de la labor con los rescates que realiza Tails from the Foster Kittens en su cuenta de Facebook.
