Unos gatitos fueron abandonados en una caja en un estacionamiento en Carolina del Norte (Estados Unidos). Afortunadamente, David, un buen samaritano que pasaba por el lugar escuchó los gritos y salió al rescate.
En total, David encontró a 6 pequeños, inmediatamente se puso en contacto con Sparkle Cat Rescue (en Burlington) en busca de ayuda para estos hermosos felinos, según Love Meow.
La voluntaria del refugio, Sarah Kelly, quien acogió a los gatitos como su madre adoptiva provisional, empezó a dar los cuidados necesarios para que estos animales salieran adelante y pudieran ser adoptados.
Gatitas inseparables fueron rescatadas
Al pasar los días, Sarah observó que dos pequeñas, nombradas Cookies and Cream (CC) y Caramel (Cara), no se separaban y hacían todo juntas; su vínculo era muy fuerte.
Las dos hermanas nunca están lejos la una de la otra, a la hora de la siesta se abrazan juntas y ronronean hasta quedarse dormidas, ¡son un dúo dinámico espectacular!
Pasaron los días y los gatitos empezaron mostrar un buen crecimiento, gracias a los cuidados de Sarah.
Estos hermosos felinos recuperaron su estado de salud y estaban listos para ser adoptados por una familia que les brinde una buena calidad de vida.
Era sabido que CC y Cara debían estar juntas, su vínculo no podía romperse ya que compartían todo en su día a día.
Luego de unas semanas todos sus cuatro hermanos fueron adoptados y encontraron familias amorosas.
Pasaron los días y estas hermosas gatitas esperaban pacientemente por una familia que les diera todo el amor que necesitaban, eso sí, siempre una al lado de la otra.
Días antes de Navidad, Sarah escribió una bonita carta para Santa de parte de estas dos hermosas hermanas, pidiendo por una familia que las acogiera y las cuidara por siempre.
Los días se fueron convirtiendo en semanas y luego en meses, estas bellas hermanas se convirtieron en jóvenes y aún no llegaba esa familia amorosa para ellas.
Sarah compartió:
«Cara y CC son tan pacientes por haber esperado tanto tiempo. Es frustrante cómo estas jóvenes y dulces gatitas sean pasadas por alto por los más pequeños».
Pasaron meses, CC y Cara disfrutaban estar en la puerta de su refugio viendo pasar a las personas. Tal vez solo querían que alguien las viera y se las llevara para hacerlas parte de su familia.
Pero como toda espera tiene su recompensa, luego de 314 días en el refugio, una pareja se enamoró de este par de felinas y las llevó a un nuevo hogar lleno de mucho amor.
Hoy, Cara y CC son muy felices con su familia, y Sarah agradece a todas las personas que hicieron posible su adopción. Ella está muy feliz por la nueva vida de este par de hermanas.
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