Dos pequeñas gatitas encontradas juntas a un costado de una carretera, aparentemente porque su madre las había abandonado, se apoyaron mutuamente para salir adelante y así progresaron en sus vidas.
A pesar de solo tener aproximadamente un día de edad y de no tener comida, las pequeñas criaturas se mantuvieron en movimiento hasta que las rescataron. Por fortuna, una persona de buen corazón pasaba por el lugar, las recogió y de inmediato buscó ayuda de un refugio de animales local.
Con la ayuda de varios voluntarios, las hermanas felinas llegaron a Sparkle Cat Rescue, en Carolina del Norte, para que las cuidara alguien con experiencia.
Gatitas encontradas juntas son inseparables
Sarah Kelly, se hizo cargo de las pequeñas y empezó a proporcionarle cuidados especiales y a alimentarlas cada dos horas durante todo el día.
Después de limpiarlas y alimentarlas con mucho cuidado, las gatitas llamadas Soleil y Luna, se acurrucaron en la incubadora y tomaron un merecido descanso. Aunque las hermanas eran muy pequeñas, se podía notar que tenían unas ganas increíbles de vivir y luchaban con todas sus fuerzas para sobrevivir.
Por lo general, los recién nacidos son muy vulnerables a enfermedades si no se alimentan con leche materna, por lo que Luna desarrolló una infección ocular, y necesitaba tratamiento médico diario para superar la infección. Soleil se convirtió en su protectora durante todo el proceso de recuperación.
Cuando Luna era tratada, su hermana ponía su cuerpo sobre ella o le montaba una pata, como si estuviera tratado de decirle que todo estaba bien. Desde que llegaron al refugio de animales, las dos hermanas mantenían juntas, eran inseparables, y sabían que si unían fuerzas podían superar cualquier adversidad.
Durante toda la recuperación de Luna, Soleil siempre estuvo a su lado y la animaba para que ella pudiera superar ese obstáculo en su vida. Luna siempre miraba a su hermana y seguía sus pasos, y cuando Sarah entraba con la comida, empezaban a maullar formando un gran dúo.
Soleil era la más extrovertida y confiada de las hermanas, por lo que rápidamente se acercó a su madre de acogida para acariciarle el rostro. Mientras eso sucedía, Luna solamente miraba lo que hacía su hermana y trataba de aprender la forma en la que debía de comportarse.
Al pasar los días, las dos pequeñas aumentaron de tamaño, por lo que las trasladaron a una habitación con más espacio y un lugar para jugar. El dúo felino continúo perfeccionando su manera de comportarse en pareja, siempre se mantenían a la vista y se imitaban hasta su forma de jugar.
Sarah dijo según Love Meow:
«Estas chicas tienen mucha personalidad. Soleil es dulce, cariñosa y obsesionada con la atención, mientras que Luna es atrevida, cautelosa, curiosa y amorosa».
Lo más importante es que Soleil siempre ha sido una voz de aliento para su hermana, la cuida y la anima a vivir nuevas experiencias.
Desde el día que fueron encontradas en la carretera, las dos hermanas siempre han estado juntas y han creado un vínculo casi irrompible. Por esa razón, Sarah esperaba que cuando llegara el momento de adoptar a las hermanas, una familia especial decidiera llevarse a ambas gatitas a casa.
Afortunadamente, después de dos meses de un increíble progreso y de cuidados especiales, las hermanas hicieron su sueño realidad y consiguieron un hogar para siempre.
Sarah dijo:
«Fueron oficialmente adoptadas juntas. Ese fue el ‘final feliz’ que soñamos para ellas. Estamos muy emocionados por ellas y su maravillosa nueva familia».
Ahora las hermosas gatitas están viviendo la vida que tanto se merecían tener desde un principio, rodeados de una familia que las ama completamente.
Se están adaptando muy bien a su nuevo hogar, pero seguramente nunca olvidarán a las personas que las ayudaron cuando más lo necesitaban.
