Delbur es un encantador novillo de Jersey de dos años y medio, que fue rescatado por una familia de granjeros en Michigan, EE. UU. El animal fue adquirido originalmente por la familia para ser convertido en alimento debido a la escasez de carne durante la pandemia por el Covid 19.
Por fortuna, para Delbur, esta idea inicial fue todo un fracaso, ya que terminaron por enamorarse de él por completo. Ahora el novillo es parte de la familia y es un gigante consentido por todos en casa.
Shiane, la madre adoptiva de Delbur dijo a Metro UK:
«Durante el Covid decidimos que íbamos a convertirnos en productores de carne, así que obtuvimos a Delbur… Técnicamente, la raza de Delbur no es realmente para la carne, pero en ese momento era difícil encontrar vacas de carne, así que compré cualquier raza que pudiera obtener. Nos dimos cuenta muy rápido de que era raro. Era como un cachorro».
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La mujer recuerda:
«Me mugía cuando estaba en el porche… Cuando bajamos a verlo, comenzó a correr y saltar; cuanto mayor se hacía, más corcoveaba y saltaba. Estábamos como: «¿Cuál es su problema?».
De acuerdo con Shiane, no es raro que las vacas de esta raza sean un poco más amigables que otras, pero nunca había conocido a una con una personalidad como la de Delbur. La familia también ha acogido en la granja a algunos perros, gatos, pavos, patos y caballos.
El resto de la familia parecía algo escéptica ante la decisión de Shiane. La mujer recuerda que su cuñada incluso le preguntó si realmente lo haría.
Shiane cuenta:
‘Mi cuñada estaba como: ‘No lo vas a matar’ y estaba tratando de ser dura, diciendo: ‘Lo conseguí para la carne, lo voy a hacer’. Esto es lo que hacen los granjeros. Y luego, el día de ir al carnicero mi rímel se me estaba corriendo por la cara. Estaba llorando».
El esposo de la mujer logró notar la angustia en su rostro, e incluso le preguntó si estaba segura de lo que estaba haciendo, pero ella trató de mantenerse firme en su decisión.
La mujer recuerda:
«Lo cargué en el remolque y… Delbur simplemente entró como ‘Oh, oye, ¿a dónde vamos?'».
Shiane le dijo a su esposo que al llegar debían hablar con el encargado ya que era su primera vez y aún no sabían cómo se debía proceder en todo el asunto con las vacas. Al ver a Delbur el carnicero preguntó si era molestado por el resto del ganado, puesto que era muy pequeño aún.
Shiane agregó:
«Ese es exactamente su problema’ él es demasiado amigable. Cuando los caballos y la otra vaca querían comer, a Delbur simplemente lo molestaban y se paraba en la esquina lejos de la comida. Pero si los separabas para que él pudiera conseguir su propia comida, entonces se sentiría solo: lloraba y todo el vecindario lo escuchaba».
Luego de una pequeña conversación, Shiane supuso que su esposo había descargado a las vacas y esperó dentro del vehículo para después regresar a casa, poco tiempo después él le pide que salga del auto y revise si la puerta del remolque está bien cerrada.
La mujer dijo:
«Yo estaba como: ‘¿Hablas en serio? Estoy en Crocs, mis pies se van a enlodar. Pero él me dice que me dé prisa y que lo haga muy rápido, así que salgo y Delbur dice: ¡MUU!. Entonces, por supuesto, estoy llorando de nuevo».
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Su esposo le aseguró que habló con el carnicero y al ver a Delbur aún tan pequeño le dijo que lo llevaría a casa para engordarlo un poco y después regresaría.
Shiane dijo:
«No, esto estaba destinado a ser. Se va a casa conmigo y no va a volver al carnicero».
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Ahora el novillo es la mascota favorita de la familia en la granja, disfruta de jugar a la pelota y busca el afecto de sus humanos como si se tratara de un cachorro.
Finalmente, Shiane añadió:
«Él es adorable. A veces me gusta disfrazarlo para las fiestas: lo vestí como un fantasma para Halloween y simplemente no le importa. En el verano, puedo abrir la ventana de la cocina cuando estoy lavando los platos y decir: «Delbur», y él deja de hacer lo que está haciendo, me mira y dice: ¡MUU!».