Una gata embarazada llegó a las instalaciones de Animal Welfare League of Arlington, un centro de rescate de animales ubicado en Virginia. La gatita de dos años llegó con la esperanza de tener la oportunidad de una vida mejor, y tan pronto conoció su hogar de acogida se enamoró por completo.
Pronto, la futura madre felina llamada Freckles, demostró su ansiedad por llamar la atención de su cuidadora y quería recibir muchas caricias. Freckles se arrojó al suelo, se acostó boca abajo, encendió su pequeño motor de ronroneo y comenzó a amasar su cama con sus patitas delanteras.
La gatita parecía estar muy feliz de poder tener un techo y, sobre todo, de tener una gran variedad de alimentos para calmar su apetito.
Gata está encantada de tener un hogar
Además, estaba dichosa de contar con humanos amorosos que le froten su rostro, ya que estaba deseosa de recibir mucho afecto y atención. Sin embargo, estaba enamorada de Asa, su madre de acogida, así que se acurrucaba en su regazo y agitaba sus patitas para demostrar su felicidad.
Cada mañana despertaba con una familia cariñosa que la complacía en todo lo que quería, por lo que estaba muy emocionada y ronroneaba de entusiasmo.
Durante los siguientes días, Freckles conoció a todos los residentes de la casa, incluyendo a los humanos como a los peludos, y a todos se los ganó.
Asa dijo a Love Meow:
«Estaba disfrutando de todos los rasguños en la barbilla mientras esperábamos pacientemente a los bebés».
Una noche, Freckles decidió instalarse en el nido preparado para ella y empezó a tener contracciones, al parecer se llegaba la hora esperada. La gatita se sentía tranquila porque tenía a su madre cerca para ayudarla, así que pudo dar a luz a seis adorables gatitos.
Asa comentó:
«Fue una noche larga para la nueva mamá, estuvimos despiertos hasta las 3 a.m. pero todos están sanos y felices, que es lo único que importa».
Desde ese momento, Freckles comenzó a cumplir con sus deberes maternos y empezó a alimentar, limpiar y a cuidar a sus seis pequeños.
La gata apenas salía de su nido para algunas necesidades, por lo que Asa le llevaba comida mientras que ella atendía las prioridades de sus bebés. Después de atender por varios días las necesidades de sus gatitos, Freckles comenzó a tomar pequeños descansos entre comidas, para estirarse y caminar un poco.
Además, se acercaba ronroneando a su madre adoptiva y le exigía un poco de caricias, ya que anhelaba compartir mucho tiempo con ella.
Asa agregó:
«Ella es muy dulce. Pensé que era así porque está embarazada, pero su comportamiento no ha cambiado en absoluto desde que tuvo bebés ¡Le encantan los cabezazos y es una máquina de ronronear!».
Todos los gatitos están progresando como unos verdaderos campeones, pero todo se debe gracias a que cuentan con una madre muy atenta e increíble.
Cuando los gatitos estén lo suficientemente grandes, Freckles se retirará oficialmente de sus deberes de madre y estarán listos para encontrar un hogar definitivo. Lo mejor es que la gatita no tendrá que pasar por otro embarazo y será el centro de atención de una familia amorosa para siempre.