Un perro lobo irlandés de 200 libras llamado Fergus, que vive junto a su familia en Nashville, Tennessee (Estados Unidos), pasó por difíciles momentos cuando viajaba junto a sus padres en el auto. En un semáforo, un automóvil los chocó por detrás y la fuerza del choque expulsó a Fergus, el cual afectado por el impacto se levantó y se alejó del auto.
Meredith McKay Luckett, la hermana de Fergus, dijo a The Dodo:
«En unos segundos, mi padre ya había saltado del auto y estaba tratando de encontrarlo, pero simplemente se había ido. Como puedes imaginar, estaba loco de miedo, así que simplemente se escapó».
Chica no deja de llorar cuando ve a su perro perdido
Meredith y su familia alertaron a la gente de su comunidad sobre la desaparición de su amado perro, y en pocos minutos, cientos de personas de toda la ciudad se reunieron para ayudar en la búsqueda del enorme animal.
La chica dijo:
«A los 30 minutos de ocurrido el accidente, la gente recorría toda el área tratando de ayudarnos a encontrar a Fergus. Tuvimos grupos de rescates involucrados con estaciones de alimentación instaladas y estábamos haciendo todo lo posible para seguir las pistas».
Los días pasaban y la familia no tenía ninguna señal de Fergus, pero la gente se negó a perder las esperanzas.
Meredith dijo:
«En cualquier momento dado, a dos millas del lugar del accidente, los automóviles circulaban con las luces intermitentes encendidas y bajaban la velocidad. Fue increíble».
Justo cuando las esperanzas disminuían, y se pensaba que Fergus no volvería, Meredith recibió una llamada.
Ella dijo:
«Todavía estaba dormida cuando mi teléfono empezó a sonar y me dijeron: ‘Tenemos a tu perro'».
Ella sintió el más grande alivio al saber que su amoroso perro estaba finalmente a salvo.
Meredith añadió:
«Definitivamente es un gigante amable. Es un poco diva y le encanta estar adentro, que es una de las razones por las que teníamos tanto miedo de que estuviera afuera. Definitivamente una mascota mimada».
Para cuando la chica llegó a la casa donde estaba Fergus, que quedaba relativamente cerca del lugar del accidente, la madre de Fergus ya estaba allí. Meredith no pudo evitar romper en llanto cuando vio a su perro de nuevo. Por su parte, el perro se le unió, se acurrucó en su hombro y aulló de felicidad.
Ella dijo:
«Claramente, fue una reunión bastante emotiva».
La familia llevó al perro al veterinario, para recibir tratamiento por los golpes y magulladuras que recibió en el accidente.
Meredith dijo:
«Va a ser un largo camino para él. En este momento, estamos realmente enfocados en curarlo».
Por ahora, Fergus está descansando en casa junto a su familia, quienes están muy agradecidos por volver a tenerlo con ellos.
Finalmente, Meredith dijo:
«Pensé que estaba malcriado antes de que pasara todo esto, pero ahora lo tratan como un rey. La gente ha estado pidiendo enviarle regalos, y él ha obtenido algunos juguetes nuevos y algunas golosinas. Simplemente está viviendo el sueño, y solo nos aseguramos de que esté cómodo».